Hoy hemos estado trabajando la expresión oral en clase de una manera diferente y divertida. Además, hemos realizado una dinámica que nos ha servido para trabajar y concienciarnos de la importancia de la concentración, la atención y la fluidez a la hora de leer y expresarnos aquello que queremos contar..
La actividad consistía en que cada niñ@ debía leer su redacción y exponerla al resto de la clase. Para ello y así darle la importancia que merece el momento, se podían subir en su silla y tenían que contarnos aquello que habían plasmado en el papel de una manera diferente..
Partiendo de este ejercicio , hemos intentado apreciar "muletillas", repeticiones y errores gramaticales en la exposición, dando una palmada seca cuando existían.. De esta manera nos concienciamos e intentamos evitarlo..
Por último, y como dinámica estrella y más divertida hemos realizado la siguiente actividad..
La "ponente voluntaria", engañada, salía del aula, mientras se les proporcionaba al resto de los equipos el propósito de la misma y su papel durante el proceso.
Cuando se expone en público, a veces, nos sometemos a nervios que parten de nosotros y que debemos intentar controlar durante la exposición y en otras ocasiones, a aquellas situaciones que genera el auditorio y que pueden provocar pérdidas de atención o concentración en quien expone.
Hoy se trataba de hacer frente a todas estas dificultades, cada grupo y por turnos tenía que actuar y llevar a cabo unas consignas establecidas por mi mientras leía nuestra protagonista..
Un equipo, debía hacer ruido con los papeles que tenía encima de la mesa, otro, a continuación, debía cuchichear y susurrar, el siguiente se constipaba de repente y sufría un ataque de tos, el cuarto, apretaba las botellas de agua de forma rítmica, el quinto tenía un ataque de risa momentáneo y por último, el sexto, se levantaba y salía de la clase ante el estupor de la ponente..
La experiencia ha salido satisfactoria y ambas ponentes han conseguido terminar la prueba sin sufrir el desgaste del público..